Ante los daños que que dejó la sequía en 22 entidades de país, el gobernador de Durango, Jorge Herrera Caldera, propuso adelantar para 2013 acciones de recuperación, apoyo y rescate en las comunidades afectadas por el fenómeno climatológico que orignó daños en la agricultura y ganadería asimismo crisis alimentaria y carencia de agua para consumo humano.
“La verdad es que la sequía ha sido más desastrosa y con daños severos, incluso peor que el huracán Sandy”, enfatizó durante la sesión de instalación de la Comisión de Protección Civil de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), celebrada en el puerto de Veracruz.
En Durango se han implementado diversas acciones de apoyo, como la cruzada Una Gota de Ayuda con el respaldo de la sociedad, además de programas como los huertos familiares e inversiones por más de 2 mil millones de pesos de los tres órdenes de gobierno, sin embargo, han sido insuficientes, comentó.
Se trata de un fenómeno silencioso y que casi no se ve, pero con efectos fatales en las comunidades rurales de 22 estados del país que han sufrido pérdidas en sus cosechas y ganado, plagas en el bosque; además de crisis alimentaria y carencia de agua para consumo humano y para las actividades agropecuarias, explicó.
Los daños de esta sequía estarán presentes al menos durante los próximos tres años, de tal manera que es urgente que en 2013 se adelanten acciones para recuperarse de las consecuencias y rescatar a los campesinos que no han podido superar los efectos de este fenómeno, destacó.
Herrera Caldera lamentó la insensibilidad del gobierno federal para atender con apoyos extraordinarios el problema de la sequía, sin embargo, confió plenamente en una respuesta oportuna y humana del nuevo gobierno de la República que encabezará Enrique Peña Nieto.
Ante los desastres naturales con efectos cada vez más devastadores, la respuesta debe ser inmediata, sin regateos y sin posiciones políticas, apuntó Herrera Caldera en franco respaldo a la Conago que exigió flexibilizar las normas de operación para evitar burocracias y agilizar la entrega de apoyos en casos de sequía, inundaciones, heladas u otras contingencias.
El mandtario expresó que existe la confianza de un cambio de fondo en la política de protección civil, para trabajar bajo una política de gestión integral de riesgos en la que todos asuman tanto sus compromisos como sus responsabilidades.
En San Pedro mueren 20 mil reses
Uno de los municipios en donde la principal actividad económica es la pecuaria en Durango es San Pedro del Gallo, y por consiguiente es uno de los más afectados por los 22 meses de sequía que vivió la entidad.
El alcalde de este lugar, Patricio Valdez, dijo que durante el periodo de estiaje se perdieron 20 mil reses, lo que ocasionó un daño severo al patrimonio de las familias.
Consideró que se ha logrado una buena meta en abasto de agua potable en las distintas localidades en conjunto con apoyos del estado y de la Federación a través de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Sin embargo, uno de los problemas que persiste en San Pedro del Gallo es la insuficiencia del recurso natural para el ganado, porque el municipio es 100% ganadero y es donde nos está pegando.
Por lo anterior se hicieron solicitudes a la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (SAGDR) para efectuar perforaciones de pozos y de esta forma contar con agua para el ganado.
De acuerdo con Patricio Valdez, se requiere de un recurso extraordinario para atender la problemática de su municipio e informó que la mayoría de la gente tiene agua en su casa, sin embargo, en lo que se sufre es porque quedó poco patrimonio tras la sequía que se vivió en el estado, y en la actualidad se realiza el traslado agua desde los domicilios hasta la labor o hasta la parcela en donde están los animales.
AFECTACIÓN. Entre 15 mil y 20 mil cabezas de ganado murieron tras la sequía que azotó a Durango, de acuerdo con el presidente municipal de San Pedro del Gallo. (Foto: ARCHIVO EL UNIVERSAL )
Rosa Gaucín
Fuente: eluniversal