- Lo recaudado será utilizado en infraestructura hidráulica para llevar agua potable a las comunidades,
- Serviría para atender a la población que ya se encuentra con enfermedades causadas por la obesidad y campañas para combatirla.
Con la finalidad de reducir el índice de obesidad y las enfermedades que se derivan de está, como es la diabetes; el Diputado Local del PRD, Jocías Catalán Valdés, presentó una iniciativa en la que propone cobrar un impuesto de 20% a las bebidas con ocho o más kilocalorías por cada 100 mililitros de producto, sin embargo no pretende ser una solución definitiva.
“La presente iniciativa no intenta ser la solución definitiva al problema de obesidad derivada de las malas costumbres de alimentación, sí es una herramienta para su combate, pues desde nuestra perspectiva el gravamen tendría por un lado una inhibición del consumidor para este tipo de bebidas al ser incrementadas en su precio, prefiriendo así las que procuren una ingesta menor de kilocalorías, así como propiciar en la industria refresquera el impulso a productos con contenidos menos calóricos”, comentó el legislador perredista.
Del mismo modo, plantea gravar únicamente las bebidas embotelladas que tengan un consumo calórico excesivo, siendo así que las bebidas que contengan una cantidad menor de kilocalorías, no pagarán impuesto, bebidas que de acuerdo a la publicación de la Revista del Consumidor actualmente existen en abundancia, por lo cual, no se obliga a la industria refresquera a realizar un esfuerzo extraordinario para continuar explotando el gran mercado mexicano.
Añadió, que lo recaudado por este impuesto traería como consecuencia una mayor recaudación fiscal, misma que se empleará en infraestructura hidráulica para llevar agua potable a las comunidades que carezcan de este vital líquido, pues como es sabido, en muchas comunidades al carecer de este recurso, es fácilmente es sustituido por el refresco, lo que a la larga constituye un mayor gasto en las familias que, en estos casos en particular, suelen ser las de más marginación económica. Otra posible función, es la de atender a la población que ya se encuentra con enfermedades causadas por la obesidad derivada de la mala alimentación, además de generar campañas informativas con el fin de crear conciencia en la población acerca de este problema.
Para finalizar, refirió que la medida que se propone, tiene como propósito mejorar la calidad de vida de la población y coadyuvar desde el ejercicio parlamentario en reducir el alto índice de sobrepeso y obesidad, pues no se pretende de ninguna manera el generar perjuicio en la industria refresquera, pero sí generar las condiciones para que la población del país tenga una mejor vida.