Por: Gerardo Viloria
La composición del gabinete del presidente ENRIQUE PEÑA NIETO envía a México algunos mensajes.
El primero de ellos es un anuncio de eficacia, de buen gobierno, de experiencia y capacidades idóneas en las más altas responsabilidades.
En la integración de este equipo de trabajo presidencial predominan los funcionarios que tienen entre 51 y 69 años de edad, así como los abogados egresados de la UNAM.
Quince de los 27 nuevos funcionarios federales nacieron entre 1943 y 1961; de los secretarios, 10 estudiaron Derecho, y de ellos nueve lo hicieron en la máxima casa de estudios.
Otros seis de los secretarios son economistas, y tres tienen ambas licenciaturas.
Hay además otros dos que estudiaron Contabilidad, dos médicos, un ingeniero y sólo uno cursó la carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública.
Se puede afirmar que este gabinete guarda similitudes con los equipos de trabajo que integraron otros mandatarios priistas, donde en su mayoría predominaban los abogados y economistas egresados de la UNAM, tal y como lo refleja el politólogo estadounidense -especializado en política mexicana- RODERIC AI CAMP, en su libro Los líderes políticos de México; su educación y reclutamiento, publicado en 1983.
Otros de los mensajes advierte que la integración del equipo es de buenos resultados. Para ello, designó a LUIS VIDEGARAY como nuevo titular de Hacienda, así como a EMILIO LOZOYA AUSTIN, en Petróleos Mexicanos (Pemex), y JOSÉ ANTONIO MEADE, como nuevo secretario de Relaciones Exteriores.
De la misma forma, se encuentran el secretario de Gobernación, MIGUEL ÁNGEL OSORIO CHONG, JESÚS MURILLO KARAM, procurador General de la República, el general SALVADOR CIENFUEGOS ZEPEDA, titular de Defensa y el almirante ViDAL SOBERÓN, al frente de la Marina.
Los funcionarios presentados -incluyendo a los secretarios de Estado, Staff y titulares de Pemex y CFE, 12 cuentan con maestría, y de ellos seis la cursaron en el extranjero. Es el caso de NUÑO MAYER, quien es maestro en Estudios Latinoamericanos por la Universidad de Oxford; y de LOZOYA AUSTIN, quien estudió Desarrollo Económico en Harvard.
VIDEGARAY, estudió el doctorado en Economía en el Tecnológico de Massachusetts; ILDEFONSO GUAJARDO VILLARREAL, secretario de Economía es doctor en Finanzas Públicas por la Universidad de Pennsylvania; MEADE, estudió Economía en Yale, y RUIZ MASSIEU, titular de Turismo cursó Derecho Público y Filosofía Jurídica en la Universidad Autónoma de Madrid.
De todos ellos, en cuanto a su talento y experiencia es de esperarse que las mismas se reflejen cuanto antes en la restauración de la paz y la concordia; en la renovada gobernabilidad democrática; en la recuperación y el fortalecimiento del prestigio de México en el mundo; en el retorno a la senda del alto crecimiento y la prosperidad compartida, con estabilidad macroeconómica y solidez monetaria; en una reforma educativa de gran trascendencia y amplios horizontes; en la reinstalación provechosa de México en los intercambios de la globalización; en una política integral de industrialización innovadora; en un cambio, que pronto devuelva la confianza presente y la esperanza futura a la gran mayoría de los mexicanos.