Foto: Daily News / Cortesía de Tara Tan
Tara Kimkee Tan, una empleada del lujoso hotel The Standard, de Nueva York, E.U., tuvo que afrontar un parto en pésimas condiciones debido a la negligencia de sus superiores.
La primera falta grave se presentó ante la negación del gerente de autorizar la baja temporal de la empleada por maternidad, a quien se le rompió la fuente en horas de trabajo y cuando había una «importante» fiesta en el hotel, motivo por el cual no fue desplazada a un hospital, para no perturbar el evento y fue trasladada a una habitación del hotel para que tuviera sus labores de parto.
Según la denuncia de la empleada, ni siquiera llamaron a un médico para brindarle atención probablemente por su condición de inmigrante de origen chino-malayo. Unicamente su esposo, que llegó a tiempo al hotel, pudo apoyarle en su proceso de alumbramiento.
Más tarde sería desalojada del hotel por una puerta lateral y posteriormente recibiría su notificación de despido, tras regaños del gerente que le argumentó «que no era necesario haber tenido al bebé en el hotel».
El gerente enfrenta ahora una demanda por 10 millones de dólares por discriminación y racismo, cargos por los que se ira a juicio proximamente ante la justicia estadounidense.
Redacción. Agenda Informativa.