*En otro tema mal servicio y corrupción en el servicio del agua de Jocotitlán.
En redes sociales circula información que indica que personal adscrito al Ayuntamiento de Temoaya, en específico al DIF Municipal, son agitadores y rompedores de eventos electorales con sueldo oficial y a las órdenes de la ex presidenta y ahora diputada, Nelly Rivera.
Esta situación llama mucho la atención porque los pobladores de Temoaya no tienen claro quién los gobierna, si Berenice Carrillo que gano en las urnas o la ex edil, Nelly Rivera que la da órdenes a la nueva titular de la silla municipal sin que está goce de autonomía para poder tomar sus propias decisiones sin previo Visto Bueno.
Y es que recientemente, en diversas plataforma digitales se ha mostrado documentación que evidencía que gente cercana al hermano de Nelly Rivera, Bernardo Rivera, cobran nómina sin presentarse a trabajar, pero con la encomienda de generar confusión y violencia en diversas votaciones en las cuales participan candidatos predilectos de la ahora congresista.
Estas acciones deja de manifiesto que en Temoaya hay un nuevo cacicazgo político encabezado por los hermanos Rivera que se niegan a perder el control de las tierras temoayenses.
Cambiando de tema, en el municipio de Jocotitlan sus habitantes tienen muchas fallas con el servicio municipal de agua potable que encabeza «un tal» Juan Bautista que no cuenta con la preparación y el perfil profesional para ejecutar cabalmente su cargo.
Pero encima de su pésimo desempeño como servidor público, este personaje estreno un auto último modelo y cínicamente lo presumió en redes sociales.
Por ello, Jocotitlán se pregunta cuáles son los méritos de Bautista para ocupar un puesto de tal responsabilidad y dicho sea de paso se rumora que fue a través de «billetazos» que logró tener un escritorio como trabajador municipal.