El ambiente internacional ha sido propicio para que la moneda nacional acumulara una racha de 6 jornadas consecutivas, en donde se apreció 2.75%.
En la última sesión de la semana la expectativa de una flexibilización de la política monetaria de la Reserva Federal de los Estados Unidos contribuyó a mandar a pique al dólar en el mercado internacional de divisas, situación que fue aprovechada por el peso para romper a la baja la barrera de las 13.0 unidades.
En operaciones de mayoreo, el billete verde alcanzó mínimos no vistos desde el pasado 2 de mayo, al cerrar en 12.9854 unidades a la venta, de acuerdo a cifras publicadas por el Banco de México. En el día el peso ganó 6.44 centavos, a 0.49%.
El ambiente internacional ha sido propicio para que la moneda nacional acumulara una racha de 6 jornadas consecutivas, en donde se apreció 2.75%. Dado este comportamiento, es probable que pueda estar cerca un congestionamiento, a la espera de los resultados de la reunión de política monetaria de la Fed, que se conocerán el jueves.
El tipo de cambio del peso con el dólar está validando el rompimiento del soporte de 13.05, lo que ubica al siguiente más inmediato en 12.93 unidades.
La fortaleza del peso tiene varias implicaciones, tanto positivas como negativas para la economía.
Dentro de las favorables destaca su contribución a suavizar e, incluso, revertir la actual burbuja inflacionaria, al abaratar los precios de los productos importados.
En los negativos se encuentra una posible pérdida de competitividad del sector exportador, sobre todo en momentos en que la economía del principal socio comercial de nuestro país se encuentra en proceso de debilitamiento.
En los primeros días de la próxima semana todavía podría prevalecer un sentimiento de que la Fed disparará nuevas medidas de apoyo a la alicaída economía norteamericana, luego de que el viernes se dieron a conocer resultados mixtos en mataría laboral.
Dicha perspectiva ocasionó que, el viernes, el billete verde se desplomará más de 1.0%, con respecto a una canasta de 6 divisas.
A la principal autoridad monetaria se le agota el tiempo, dado que le queda solamente la reunión de la próxima semana para poder anunciar las tan esperadas medidas de apoyo. Es muy difícil que en la reunión de finales de octubre lo pueda hacer, por la cercanía de las elecciones presidenciales del 6 de noviembre en los Estados Unidos.
Fuente. durangoaldia.com