MÉXICO, D. F.- El pasado miércoles 22 de octubre asistía la marcha organizada por grupos estudiantiles, familiares y compañeros de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, quienes hasta el día de hoy siguen desaparecidos. Debo decir que fui conmovido hasta las lágrimas.
Ver el testimonio vivo de las decenas de padres y madres que anhelan tener a sus hijos de vuelta, ver a sus amigos y compañeros con orgullo expresar su deseo de volver a saludarlos, y ver el amor de decenas de miles de mexicanos que nos sumamos al mismo sentir, ha sido una de las experiencias más quebrantadoras de toda mi vida.
Nos faltan 43.
43 familias viven hoy sin poder cobijar a uno de sus hijos, a una escuela le faltan 43 alumnos, y un país sigue sin saber dónde están y pesándose por 43 de los suyos. Nos duele, nos indigna y hacemos ese dolor el nuestro, sus lágrimas las nuestras y sus esperanzas son las mismas de todos nosotros: que los 43 aparezcan vivos.
Hablo como un mexicano más pero sobre todo como un cristiano. Si este pequeño esfuerzo llega a algún familiar, amigo o compañero de los jóvenes desaparecidos, sepan que hay un grupo que está orando por ustedes, simplemente porque los amamos, amamos este país y queremos su paz y su justicia en cada rincón habitable.
Y a la sociedad en general sepan que aceptamos ser responsables de que en tantas ocasiones hemos sido cómplices del peor de los crímenes: el silencio.
Desafortunadamente, nosotros los cristianos somos muy buenos para darnos a conocer en la vida pública cuando nuestros intereses se ven afectados, como en los temas del aborto, la unión de parejas homosexuales y la prostitución; pero esta situación nos estremece y sin duda rebasa nuestra organización de iglesias, queremos estar aquí para sumar, proponer, amar y bendecir.
Y más nos vale tener en claro que bendecir nuestro país no es solamente orar al Dios en el que creemos para que lo haga, sino despertarnos cada día y bendecirlo con la mejor medicina de todas: el amor.
“Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados”.
Los amamos. Dios les bendiga y haga justicia.
Jorge Iván García Gómez
Estudiante de la Facultad de Ciencias Políticas
y Sociales, UNAM.
Líder Juvenil del Centro Familiar Emaús.
Firmantes:
David de la Peña Trejo –Saltillo, Coahuila; Gabriela Rojo Rosas –Distrito Federal; David Suárez –Monterrey, Nuevo León; Jonathan Sarabia -Saltillo Coahuila; Erika González –Estado de México; Ana Luisa Moreno Acosta –Estado de México; Jorge García García –Estado de México; Minerva García –Estado de México; Álex Pérez Toledo –Distrito Federal; Raúl Ortega Aguilar –Estado de México; Rogelio Díaz Galarza –San Luis Potosí, San Luis Potosí; Pablo Quiroa –Distrito Federal; Keren Rodríguez Córdova, Dallas, TX; Ismael Burciaga Sr. –Dallas Tx; Dianet Moreno –Estado de México; Daniel Tolentino –Estado de México; Jessica CantúCárdenas –Monterrey, Nuevo León; Tati Martínez –Dallas, TX.; Christian Emmanuel Jiménez Gómez –Villahermosa, Tabasco; Lorayne Montes –Distrito Federal; Neby Gutiérrez –Estado de México; Maylet Ivonne Montes –Distrito Federal; Mayra Rosado Cruz –Ciudad del Carmen, Campeche; David Rosado Cruz –Distrito Federal; Edgar de Jesús García Gómez –Estado de México; Jacqueline Chávez Verdín –Tecate, Baja California; Rosita Ruiz –Ensenada, Baja California; Eduardo Danilo Ruiz Guzmán –Monterrey, Nuevo León; Melissa Valdez Lamarque –Culiacán Sinaloa; Paola Muniz –Ensenada Baja California; Mike Jay –Coacalco, Estado de México; Aracely Velazquez Gallegos –Tecámac, Estado de México; Victor Rojas Lucero; Coacalco –Estado de México; Saúl Gutiérrez Herrera –Estado de México; Sahorai Martínez Escobar –Enseada, Baja California; Israel Hermosillo –Distrito Federal; Yuliana Campos –Distrito Federal
#OremosporAyotzinapa
#NosFaltan43
#TodosSomosAyotzinapa