Joven canadiense descubre ciudad maya y resuelve gran enigma

9 de mayo 2016.- Gran impacto está causando en la comunidad científica el descubrimiento de una importante ciudad maya, descifrada por un joven estudiante canadiense, quien encontró que las ciudades mayas tenían un posicionamiento basado en sus más importantes constelaciones astronómicas, descifrando así también uno de los misterios de la enigmática cultura que se desarrolló en la Península de Yucatán y Centroamérica, y algo que ningún científico había notado.

Para muchos era un enigma el posicionamiento de algunas ciudades mayas, las cuales se encontraban lejos de ríos o en posiciones geológicamente no favorables, no obstante, al parecer la posición estaba determinada por cartas astronómicas, buscando reflejar en la tierra la posición de las estrellas en importantes constelaciones.

No obstante, a sus escasos 15 años de edad, William Gadoury, ha pasado a la historia de la arqueología, pues su teoría de que había una ciudad maya faltante se comprobó, encontrándose en un recóndito e inaccesible lugar de la Península de Yucatán, una antigua ciudad maya, lo que ha dejado perplejos a científicos de la NASA, la Agencia espacial canadiense y la Agencia espacial japonesa JAXA, quienes han comenzado a reconocer la aportación de este joven, cuyo trabajo será divulgado proximamente en una revista científica, como reporta Le Journal de Montreal.

La nueva ciudad fue bautizada con el nombre K’ÀAK’ CHI’ que significa ‘boca de fuego’, y no es sólo un pequeño resquicio de la cultura maya, sino que estaría siendo una de las ciudades de mayor tamaño que se han descubierto; en las primeras indagaciones se ha confirmado la presencia de una pirámide y más de 30 edificios.

El joven adolecente de Quebec, notó que la distribución de las 117 ciudades mayas coincidían con 22 constelaciones del Codex Maya de Madrid, uno de los 4 códices antiguos que se conservan, y que apareció en España; el estudiante comparó la ubicación de los astros con las ciudades mayas a través de Google Earth, y corroboró que las ciudades más importantes coincidían también con las estrellas más importantes del códice maya.

No obstante a la constelación 23, le faltaba una de las tres estrellas que la conforman, es decir, la ciudad que no había sido descubierta, y con lo cual se comprueba la teoría de Gadoury.

Hasta la fecha se había comprobado la gran influencia de la astronomía en el diseño y construcción de las pirámides y edificios mayas; no obstante con este hallazgo, se viene a ratificar un mayor sentido de relación entre la cultura maya y los astros.

 

Agencia WM

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