Independientemente de la pertinente de solicitud que el presidente de México, ENRIQUE PEÑA NIETO ha hecho para que todas las fuerzas políticas respeten los resultados de las elecciones locales efectuadas el pasado domingo en 14 entidades federativas; con vista al 2015, es oportuno hacer un recuento de los avances y retrocesos en la materia.
Ante todo, salieron a relucir las afecciones de nuestro sistema electoral.
En primer término, la crisis de los partidos políticos estuvo a la vista de todos. De esta manera, notamos cómo en la búsqueda del poder por sí mismo, se han ido desdibujado ideológicamente los partidos.
Así, pudimos constatar las muy amplias alianzas PAN-PRD contra el PRI, pero no dejan de ser significativas en distintos lugares, incluyendo la gubernatura de Baja California, las coaliciones entre el PRI-PVEM y el muy lopezobradorista Partido del Trabajo, mientras que Nueva Alianza dividió sus acuerdos tanto con el PRI como con el PAN.
El único de los partidos pequeños que optó por ir solo en distintos lugares, sobre todo en Oaxaca y Veracruz donde tiene mayor peso, fue Movimiento Ciudadano.
En este contexto, hubo una mezcolanza de logotipos que en muchas ocasiones hicieron difícil saber por quién se estaba votando.
Por otra parte, observamos campañas llenas de descalificaciones y ataques; el grotesco espectáculo que dieron los contendientes no pudo pasar desapercibido por los electores.
Las muertes, secuestros o atentados hacia candidatos y miembros de las campañas fue noticia demasiadas veces; más de una decena de personas murieron, incluso, hasta el mismo día de las elecciones.
Otro de los signos más importantes de los comicios del domingo pasado fue el abstencionismo; con algunos paréntesis aislados, los ciudadanos están hartos de los políticos y sus partidos.
En cuanto a esto últimos, el PAN pese a sus evidentes problemas internos en la dirigencia del partido, tuvo resultados electorales que pueden ser positivos, particularmente al ganar la ciudad de Puebla y si logra conservar Baja California. Además, sin duda, fue competitivo en Veracruz, en Tamaulipas y en el norte del país en general; resultados que le podrán servir para resarcir algunas de las muchas heridas que ha acumulado en el último año.
Por otra parte, tendrá más votos que el PRD, que se dice que quedará en cerca del 15% global, entre otras razones porque el sol azteca pagó en estos comicios los primeros costos de la división con Morena, y segundo, porque algunos de los estados donde se compitió no lo han favorecido electoralmente a lo largo de los años.
Respecto al PRI, ganó 10 de las 13 capitales en juego. Frente a esto es cardinal señalar que el gobierno federal jugó un relevante papel en este proceso, pues se abstuvo de participar para favorecer a su partido.
Sin embargo, también es obligado referir que en la lógica de recuperar espacios de poder presidencial que ha marcado el presidente PEÑA en estos primeros meses de gobierno, estos comicios servirán para saber y conocer el peso específico real de los gobernadores priistas que dieron malas cuentas en los comicios.
Finalmente, en un hecho que ha sido calificado como histórico, en Zacatecas, destaca el triunfo del candidato independiente RAÚL DE LUNA TOVAR, quien ganó la presidencia municipal de Enrique Estrada.