Por: Fernando Olivas Ortiz
Fotos: Efrén Galván
ECATEPEC, Méx.- Por considerar que el gobierno del estado les ha cerrado su actividad preponderante y no tienen como mantener a sus familias, los desplazados de los negocios de ventas de autopartes de la Curva del Diablo y los dueños de bares se manifestarán el día de 14 de octubre desde las nueve de la mañana y cerrarán el flujo vehicular de la avenida Central a la altura de la estación del Mexibus, en Ecatepec, señaló Guadalupe Hernández
De esta manera la Confederación Nacional de Industriales de Metales y Recicladores A.C. de Francisco Uriostegui y la Asociación de Bares y Restaurantes (AMBAR) de Roberto Gutiérrez, se unen en un frente común llamado “Juntos Ciudadanos en la Defensa del Trabajo y Nuestros Derechos”. La cual cuenta con dirigencia colectiva y pugna por recuperar las fuentes de empleo.
La cita es en el Bar Minesota ubicado en Teocalis y avenida Central, de Ciudad Azteca, Ecatepec, Méx., donde se espera la asistencia de por lo menos 200 personas entre trabajadores de ambos sexos y que han perdido sus fuentes de empleo y no tienen como mantener a su familia, pretenden caminar hasta la Procuraduría de Justicia del estado de México en San Agustín, para presionar a las autoridades y puedan recuperar sus formas de vida y de trabajo honrado, legítimo y que no afecta a nadie y mucho menos al gobierno porque pagamos nuestros impuestos, señalaron los entrevistados.
Por otra parte un grupo de desalojados de los negocios ubicados en la avenida Central, en la colonia faja de Oro, (Curva del Diablo) se quejan porque sus propiedades han sido invadidas por CONAGUA y pese a existir un litigio se han adueñado de sus terrenos y negocios pese a contar con documentos (escrituras) que respaldan que son dueños dijeron Zenón Oliver, Guadalupe Hernández, Francisco Magallanes, Norma Flores Vidal, Esteban Hernández y Martín Mendoza Araiza y exigen al gobierno estatal que les regrese sus propiedades legítimamente adquiridas y que les permita abrir sus negocios de autopartes (deshuesaderos), que a casi un año de la clausura de los mismos no les han comprobado ningún ilícito.