CIUDAD DE MÉXICO.- Organizaciones de la Sociedad Civil y aspirantes a diputados que conformarán la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México exigen al Instituto Nacional Electoral (INE) equidad y no simulación en el proceso de registro, además que no ceda al chantaje del llamado “Pacto por México”.
Alejandro Robles Gómez, aspirante a candidato pidió al INE que no ceda a los chantajes de los partidos políticos que se oponen a que quienes tienen trabajo político participen en este proceso, “le pedimos a Lorenzo Córdova que esté atento y que no permita que siga siendo un proceso inequitativo donde los partidos lo tienen todo y los ciudadanos únicamente tiene el derecho de ir a meter unos documentos y hacer como que participan”.
El también catedrático de la UNAM y abogado constitucionalista, quien solicitó el lunes su registro, indicó que no se debe aceptar una Constitución de proclama, una Constitución de demagogia que solo este reproduciendo derechos que ya existen y que están plenamente reconocidos, como el derecho a la salud, a la educación, trabajo digno, entre otros.
Al participar en la primera asamblea de aspirantes a la Asamblea Constituyente convocada por organizaciones de la sociedad civil y académicos en el Zócalo de la Ciudad de México, coincidieron en que participarán en la elección de constituyentes a través de fórmulas independientes, aun contra la lógica excluyente con que se diseñó la elección.
De igual forma señalaron que sus candidatas y candidatos son personas con plenos derechos políticos, que trabajarán con la sociedad para conseguir su respaldo y harán campaña desde las posibilidades orgánicas que han construido en muchos años de lucha.
De manera paralela, dijeron, que recogerán de entre el movimiento social y los organismos ciudadanos, las propuestas que se harán llegar a la Asamblea constituyente.
Agregaron que la reforma política de la Ciudad de México debe ser un instrumento de poder para la sociedad, para el pueblo no un instrumento de poder para el gobierno; debe posibilitar la exigibilidad de los derechos ciudadanos, escuchar y procesar las demandas sociales, hacer una capital jurídicamente garantista. Si bien las organizaciones sociales aquí presentes damos un voto de confianza para este proceso institucional, también reconocemos que si el pueblo no está representado en este histórico momento debemos continuar con las formas de lucha social que abren espacios no de manera tersa a la inclusión política y la solución de nuestras demandas.