SECRETO A VOCES es tanto la violencia como la inseguridad en Luvianos, y en el caso que comentamos se dan las dos situaciones: sin embargo las autoridades a cargo de la seguridad de la entidad, la Procuraduría de Justicia, la secretaría de Seguridad Ciudadana y la secretaría General de Gobierno, a cargo de José Manzur, están a la espera de que haya “denuncia” formal de la familia del afectado para que intervengan las autoridades del ramo…
SIENDO TAN EVIDENTE, y luego de los antecedentes comentados líneas arribas, para nuestros funcionarios “es una condición que la familia del afectado denuncie el ilícito”, ignorando o pretendiendo ignorar que ellos, los familiares, viven en Luvianos, y están inermes ante la delincuencia ya que carecen de protección de las autoridades, en este caso de los tres niveles de gobierno, ya que pese a los despliegues tanto del ejército como de la policía federal en la zona, la delincuencia sigue haciendo de las suyas…
EN SUMA: la ciudadanía de Luvianos y la del país, suponemos, demanda que al margen de tecnicismo legales a la delincuencia SE LE PERSIGA DE OFICIO y no se le dé margen para que huya o se fortalezca ante la inactividad o permisividad de las autoridades responsables de la seguridad, que no se le dé facilidades a los malhechores para ejercer su dominio sobre la ciudadanía sureña, en este caso, a la que tienen asolada…