*Ofrecer protección en salud es un elemento base para garantizar productividad y desarrollo económico.
*Es necesario el análisis y actualización de Normas Oficiales Mexicanas, en lugar de la cancelación de las mismas.
*El aplazamiento de la decisión del Comité de Normalización de la Salud Pública de cancelar 34 NOM, permitirá al sector productivo estar cerca de la toma de decisiones y pugnar por garantizar la seguridad de los colaboradores: Sauza Martínez.
TOLUCA, Méx.- El cuidado de la salud de los trabajadores y sus familias es uno de los factores determinantes para reducir problemas como la rotación frecuente de personal, el ausentismo y el pago de incapacidades, además de mantener los índices de productividad y potenciar la capacidad de desarrollo de las empresas.
Gilberto Sauza Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (Concaem) destacó el avance progresivo en la aplicación de la Norma Oficial Mexicana (NOM) 035 en materia de riesgos y enfermedades psicosociales, ya que en México el 48 % de los trabajadores vive con estrés laboral, lo que demerita el desarrollo personal, profesional, productivo y la calidad de vida de la población en general.
Precisó que la aplicación de la NOM 035 debe ir aparejada con la garantía de tratamiento de otro tipo de padecimientos, por lo que la propuesta del Gobierno Federal -a través del Comité de Normalización de Salud Pública- de cancelar otras 34 Normas Oficiales Mexicanas, de las cuales una buena parte está relacionada con temas de salud, es una decisión que debe analizarse con mayor detenimiento.
“Estamos hablando de la cancelación de al menos 25 NOMS vinculadas con temas de salud, es decir, protocolos o reglas a seguir para salvaguardar la seguridad de la población, entre ellas la detección y tratamiento de cáncer cervicouterino, cáncer de mama, obesidad, hipertensión y osteoporosis, cuyo desarrollo en todo el país es lamentablemente continuo, por lo que creemos que en realidad deberían actualizarse dichas normas y darles un mayor espectro de acción”.
El líder del empresariado mexiquense refirió que este tipo de padecimientos son los de mayor prevalencia entre las mujeres, siendo de las principales causas de muerte entre mujeres con edades entre 20 y 50 años. Por ello, abundó, es urgente generar un ambiente laboral sano que implica la certeza de tener esquemas de protección fuertes y amplios para las y los colaboradores y sus familias.
Recordó que, recientemente, se realizó la actualización de la tabla de enfermedades reconocidas por el Instituto Mexicano del Seguro Social por lo que es momento de generar un marco de atención y protección de los trabajadores de manera integral.
“Esta decisión limitaría, a la población en general, de la posibilidad de recibir una atención médica de calidad ante enfermedades tipificadas dentro de las normas señaladas, por lo que quedarían en la indefensión para exigir a la autoridad sanitaria cumplir sus obligaciones”.
De momento se ha dado una prórroga, hasta la primera semana de septiembre, para la cancelación definitiva de 34 Normas Oficiales en materia de salud, lo que abre la posibilidad para un periodo de análisis y reflexión, mediante la generación de foros con expertos en la materia.
Está etapa, subrayó, abrirá la puerta al sector productivo para estar cerca de la toma de decisiones y pugnar por garantizar la seguridad de los colaboradores, tanto en lo psicológico como en el tratamiento de enfermedades cotidianas y de alta prevalencia. (Redacción)