TOLUCA, Méx., a 15 de mayo de 2022. Tras reconocer el papel del maestro en el proceso educativo, la diputada María del Rosario Elizalde Vázquez advirtió que esta labor se convirtió en algo riesgo pues de manera frecuente son víctimas de agresiones y amenazas de alumnos y padres de familia, por lo que debe plantearse el sistema educativo con enfoque humanitario, equidad y privilegiar la formación pedagógica.
En contexto con el Día del Maestro, la legisladora de Morena refirió que son ellos y ellas quienes comparten sus conocimientos, trasmiten valores e inspiran a los alumnos a ser mejores, para ello deben tener vocación, ser proactivos en sus didácticas e interesarse en sus estudiantes, y apoyarlos en la solución de conflictos originados en el hogar, la disfunción y violencia intrafamiliar que son factores que trascienden y se reflejan en su desempeño escolar.
La integrante de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología advirtió que actualmente ser profesor se ha convertido en un trabajo de alto riesgo, el respeto que en el pasado se tenía por las y los maestros se ha ido perdiendo como consecuencia de la descomposición social.
“Ahora quienes ejercen esta profesión, son víctimas de agresiones verbales, físicas y hasta de amenazas no solo de los alumnos, también en algunos casos, de los propios padres de familia. No importa el nivel escolar ni tampoco si la escuela es de gobierno o particular, los maestros deben tolerar este tipo de maltratos”, acotó Elizalde.
Subrayó que también se ven obligados a atender grupos saturados, múltiples grupos y diversas asignaturas, tratar con estudiantes provenientes de familias conflictivas o permisivas, o excesivamente protectoras, lo cual les genera cargas administrativas enormes.
Adicionalmente la pandemia obligó a los docentes a mantenerse capacitados en el uso de tecnologías de la información para llevar a cabo la enseñanza online, y a autofinanciarse para adquirir estas habilidades, pues en sus centros de trabajo les exigen estos conocimientos pero no les aportan medios para capacitarse.
Subrayó que de la noche a la mañana el hogar de los maestros se convirtió en salón de clases, sala de juntas, centro de capacitación virtual, oficina de atención psicológica y espacio para brindar asesoría y tutoría a distancia, sin horarios, ni tiempo para atender a la familia, pero sin tregua para cumplir con los programas de estudio a tiempo.
Con el retorno a clases presenciales, las carencias para el alumnado y el personal docente se ha incrementado, en razón de que diversos centros educativos enfrentan carencias de todo tipo que pone en peligro la calidad de la educación, su asimilación y la enseñanza, porque a veces se carecen de los insumos mínimos para trabajar.
Por ello, la pandemia obliga a replantear el sistema educativo, redefinir las filosofías educativas que lo orientan, promover un nuevo humanismo, impulsar la equidad educativa, atender los vacíos en la formación pedagógica de los maestros y maestras en las Escuelas Normales y también en los que están en servicio.
Rosario Elizalde indicó que los docentes representan una de las fuerzas más sólidas e influyentes con miras a garantizar la equidad, el acceso y la calidad de la educación. Ante ello no se debe permitir que los maestros y los niños paguen el precio de las secuelas de la pandemia, pues se debe proteger el sistema educativo de las presiones financieras y las limitaciones presupuestarias actuales, pues el docente es eje indispensable para generar sociedades inclusivas, justas, igualitarias que requiere la dinámica de la vida moderna. (Redacción)